Isabel Gómez:
La actividad fue variada y abarcaba diferentes aspectos. Los alumnos habían elaborado las pelotas con las que aprendieron a hacer malabares. Parece fácil pero no lo es. De uno en uno o de dos en dos. Había que coordinarse no solo consigo mismo sino con el compañero también. En grupos más amplios escogieron las reglas del juego. Por ejemplo, dar una palmada antes de coger la pelota que te lanzaban. Entre todos escogieron las reglas que más les habían gustado y jugaron a ello. Me gusta el ambiente que se genera en clase. Hay relajación, juego y , sobre todo, ejercicio. Y todo ello ambientado con música cañera de esa que te hace moverte aunque no quieras. ¿seré yo capaz de ponerles a hacer alguna actividad con esa música de fondo? Me gustaría pero no sé si les ayudaría, quizás algo más relajado les ayudase a concentrarse. Me gustó mucho la idea de que al finalizar la clase, cada alumno autoevaluaba su trabajo. Es una buena idea para hacerles reflexionar en el día a día sobre su implicación y rendimiento en la actividad.
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